No cobran fichas millonarias ni los llaman para grabar anuncios. Pero las cifras de algunos futbolistas de las categorías inferiores son mejores que las de los cracs de Primera División. Son los otros Messi. Y los otros Casillas. Y juegan en campos de tierra. Y la crisis, cómo no, también se ha cebado con ellos.
Lejos del ‘glamour’ de la liga de las estrellas, miles de futbolistas saltan cada domingo a los campos. No visten de blanco inmaculado ni de azulgrana. No juegan ante estadios abarrotados. Y llevan una vida más esforzada que la de los cracs de Primera División, abocados al pluriempleo o la emigración. Pero algunos de ellos son estrellas en su entorno.
Su temporada regular termina este fin de semana. Desde septiembre, cada domingo se han celebrado 40 partidos en Segunda B, 180 en Tercera y cerca de 500 en las distintas categorías regionales. Entre todos ellos suman más asistentes que la Primera División en casi todas las jornadas, pese a lo cual ese fútbol no ocupa casi hueco en los medios de comunicación nacionales. Y en estas categorías menores están los futbolistas que se disputan con Messi o Casillas los títulos de mayor goleador o de portero menos goleado en las competiciones españolas.
«Durante años, ese fútbol modesto supuso una salida profesional para millares de deportistas. En la zona de Levante, por ejemplo, los equipos tenían a constructores como presidentes, y los sueldos de 3000 euros eran cosa corriente, incluso en Tercera División» , afirma Kily Álvarez, hoy en el Langreo, pero que llegó a conocer esa época de bonanza durante sus periodos en el Orihuela y el Novelda. «Ahora mismo, me merece más la pena estar en casa de mis padres, en Oviedo, que pagar un alquiler arriesgándome a dejar de cobrar y quedarme colgado». Y eso que Kily no es un don nadie. Desde 2007 es internacional absoluto con Guinea Ecuatorial. Con su selección ha jugado 50 veces y él fue el que consiguió el gol que llevó al país a su mayor hito futbolístico: pasar a cuartos de final en la Copa de África de 2012. Pero ser un ídolo en Guinea Ecuatorial no le ha reportado ningún contrato digno de llamarse así.
David Gascón, el máximo goleador esta temporada en todas las categorías nacionales, con registros superiores a los de Messi o Ronaldo, vivió aquellos años de bonanza como un nómada, pasando por una docena larga de equipos. «Es una buena vida si eres inteligente, sabes administrarte y no olvidas que debes formarte para cuando se termine. En los equipos en los que he estado, cuando se pagaba bien, siempre había quien se lo gastaba todo y quien era capaz de ahorrar». A pesar de seguir en activo, David representa hoy a una veintena de jugadores a los que aconseja en esa dirección. En realidad, una vez tienen equipo, no dan mucho trabajo. «Salvo lograr que les paguen, claro», afirma.
Lejos de aquel periodo de ‘vacas gordas’, el fútbol modesto hoy está repleto de historias cotidianas mucho menos rutilantes y de jugadores que se pagan sus propias botas y tienen seguros médicos limitados. Otro ejemplo cotidiano son los problemas para entrenar de algunos clubes por ahorrar gasolina en desplazamientos. Es el caso del Haro, el equipo con mejores cifras de España, líder de la Tercera División de La Rioja y que tiene en sus filas al portero menos goleado de todas las categorías las dos últimas temporadas, Javi Pérez. A su entrenador le gustaría reunir al equipo más de las tres veces semanales en que lo hace; pero 15 de sus jugadores residen en Vitoria, a 45 kilómetros, y pese a que viajan juntos en cuatro coches no hay presupuesto para pagarles más desplazamientos.
Aunque solo una minúscula parte de los 3600 millones de euros de deuda del fútbol español corresponde a los equipos por debajo de Segunda División, los acreedores son mucho menos tolerantes con ellos que con los clubes grandes. En los últimos años han desaparecido una media de cinco equipos por temporada; este año está en duda la continuidad de clubes con historia en Primera como el Albacete, que debe conseguir 3,7 millones de euros, o el Cádiz. Eso sí, estos años de realismo han reducido las deudas de los clubes con los futbolistas. la última temporada, según el sindicato de jugadores, bajaron un 35 por ciento, hasta los 613.000 euros.
Una alternativa para los futbolistas es la emigración. Ahora mismo hay cerca de 300 futbolistas españoles en lugares tan dispares como Bolivia, Ucrania o Tailandia. Y abundan las historias de éxito como la de Ángel Viña, el exjugador del Rayo Majadahonda que ha sido elegido dos veces mejor futbolista de la Champions League de Oceanía con un equipo neozelandés. El buen cartel del fútbol español les ha abierto puertas, como si se tratara de los brasileños de hace un par de décadas Carlos Gazapo, con breves experiencias en el fútbol inglés y el alemán, avisa de las ventajas e inconvenientes de esa salida. Se hace duro dejar a tu gente, aprender a toda velocidad un idioma, adaptarte a otro estilo de juego . A cambio, Gazapo destaca las mayores facilidades que dan los equipos en otros países de Europa para que los futbolistas desarrollen a la vez una carrera profesional. Es un factor importante que en España se ha descuidado durante mucho tiempo, en particular en las canteras de los equipos grandes, que han exigido a priori una dedicación completa al mundo del fútbol, sin dejarles ninguna salida al colgar las botas.
El otro Casillas
Guardameta menos goleado de España en las dos últimas temporadas. Javi Pérez, 25 años.Portero del Haro (Tercera División)
«El fútbol me sirve para no pedir dinero a mis padres»
La temporada pasada fue el portero menos goleado de España, con 17 tantos encajados en 36 partidos. Eso le hizo soñar con irse a un equipo profesional, pero las ofertas no llegaron. Este año sigue en su línea: recibe menos den la portería del Haro, el equipo español con mejores resultados (una derrota en 36 partidos, con 97 goles a favor y 13 en contra). Pero ha perdido la fe. Si no he salido de Haro con 25 años, no creo que lo haga ya explica. «He tenido mala suerte, el fútbol vive un momento flojo y solo puedo verlo como un complemento para no pedir dinero a mis padres . En el Haro, los sueldos oscilan entre 200 y 400 euros al mes; el año pasado, Javi licenciado en Historia encontró una suplencia como profesor de secundaria, pero este no ha habido suerte. Me gusta mandar, sé leer el juego, anticiparme y comunicarme con mis compañeros. Y números así, año tras año, no son casualidad», remata.
El otro Futre
Hijo de Paulo Futre. Fabio Futre, 22 años.Extremo del Trival Valderas (Tercera División).
«La Tercera División es la más dura, es fútbol real»
El apellido solo ayudó a Fabio Futre a acceder a la cantera del Atlético de Madrid. Luego le ha tocado vivir todas las miserias del fútbol. las suplencias, los campos de tierra y una lesión de rodilla que lo llevó a decidir su retirada en julio. Pero una oferta del Trival Valderas le hizo volver a tener ilusión. Mi mentalidad ahora es disfrutar del fútbol después de tantos problemas , señala Fabio, que es extremo, como su padre exjugador del Oporto o el Atlético de Madrid, aunque en la banda derecha. Fabio tiene frescas las diferencias entre el fútbol que se practica en las canteras de los grandes clubes, muy centradas en la calidad y en los resultados , y el de los equipos modestos, cuya prioridad principal es mantenerse en pie. El de Tercera es, para él, más duro; el fútbol real, donde encuentras gente que sabe ir al choque y se impone desde el primer momento . Su idea es jugar la próxima temporada en algún país europeo. Portugal, la patria de sus padres, parece una buena opción, aunque no se cierra a ningún destino. Quiero salir y conocer una cultura nueva, una forma de juego diferente . Y si no encuentra equipo, su plan B es el de empezar los estudios en el INEF.
El otro Messi
Máximo goleador nacional esta temporada con 2,3 tantos por partido. david gascón ‘copito’, 35 años. Delantero del Badajoz 1905 (Regional extremeña).
«Reconozco que cada domingo me informo de cuántos goles lleva Messi»
Con 33 años, David Gascón sufrió un ictus cerebral. Era el final de la carrera de este goleador que llegó a militar en el Villarreal en Primera. Se recuperó y se convirtió en agente de jugadores modestos, pero siguió jugando con veteranos hasta que el pasado verano le llegó la oferta del Badajoz 1905, un nuevo equipo de la capital pacense constituido en Regional. Copito volvió por la puerta grande en una categoría para la que le sobra clase y experiencia: ha marcado 53 goles en 23 partidos. «En comparación, Messi, al que sigo cada domingo , ‘solo’ lleva 45 goles en 34 partidos. Porque nuestra Liga es corta, de solo 26 partidos. Si llega a ser de 38, como el resto, llego a los cien». Los médicos ya no le prohíben hacer deporte, pero Copito aún tiene una mancha blanca de origen desconocido. Yo me siento bien, así que el año que viene volveré para jugar en Preferente. Es la categoría que me falta: seré el único futbolista de la historia que ha jugado en todas las competiciones de España .
El otro Torres
Ha vuelto a españa tras pasar por el fútbol alemán y el inglés.carlos gazapo, 28 años. Delantero del Alcalá de henares (Segunda B).
«En Alemania creen que todos los españoles la tocamos como en la selección»
Tras licenciarse en Administración y Dirección de Empresas, Gazapo pensó que necesitaba aprender idiomas e hizo el petate rumbo a Mánchester. Allí, su historial de cinco años en la cantera del Real Madrid le dio un puesto en el Curzon Ashton, de una Liga semiprofesional comparable con la Tercera española. Una oferta del San Sebastián de los Reyes le hizo regresar a España, de donde volvió a salir el pasado verano rumbo al Lichterfelder 1892 berlinés. «Allí, nos consideran los técnicos, los ‘jugones’. Creen que todos los españoles la tocamos como en la selección», dice. Volvió en el mercado de invierno por otra buena oferta del Alcalá, pero cree que en septiembre volverá a Alemania. «Cobras algo menos, pero son formales con los pagos, se ocupan de temas como el piso y te dejan tiempo para otras actividades. El nivel es parecido a nuestra Segunda B en cuanto a juego e ingresos, pero no te ponen pegas si tienes un trabajo por la mañana».