Las damas del Águila
Estampado animal, cuero, vestidos con transparencias y ‘looks’ inspirados en el salvaje Oeste… Las actrices de ‘Águila Roja’ protagonizan las tendencias más indómitas de la temporada mientras nos desvelan los secretos de la serie. Por Raquel Peláez
Se abrazan nada más llegar, se piropean e intercambian chascarrillos. Las actrices de Águila Roja son casi una familia. Seis años rodando juntas dan para mucha confidencia compartida y mucho callo en cambios de vestuario. Corsés, escotes y encajes del siglo XVII se sustituyen hoy por cazadoras tipo perfecto, pantalones de cuero rojo o vestidos con motivos felinos. Miryam Gallego (la marquesa), Inma Cuesta (Margarita) y Elisa Mouliaá (Irene) vuelven a la pequeña pantalla con una nueva temporada, en la que veremos cómo las mujeres toman las riendas y se rebelan contra todo lo establecido. Margarita se independiza del héroe para darle el sí, quiero a una nueva causa; la marquesa emprende un negocio en un mundo de hombres; e Irene, enfrentada a un amor prohibido, se planteará su divorcio del comisario. Todo un bombazo para un Siglo de Oro muy especial y con mucha historia entre bambalinas
XLSemanal. Parece que esta temporada vuestros personajes entran más fuertes que nunca
Miryam Gallego. Sobre todo la marquesa, que se atreve a poner un negocio de comercio con África con todo lo que conlleva. enfrentarse a un mundo totalmente masculino, donde no se lo van a poner fácil.
Inma Cuesta. Y eso en una época en la que todas las mujeres eran floreros. Incluso la reina era un florero del rey. La marquesa, en el fondo, es el personaje más adelantado de la serie.
Elisa Mouliaá. Imagino que en ese momento sería muy difícil entender a una mujer así. Para mi personaje es inconcebible su actitud.
Miryam. Es una auténtica transgresora en todo. Con el vestuario, con sus novios No le baila el agua a nadie.
XL. Lo del personaje de Elisa, informándose sobre el divorcio, algo de transgresor también tiene, ¿no?
Elisa. Totalmente. Es muy valiente por su parte intentar rebelarse contra su matrimonio con el comisario.
Inma. Sí, es una moderna que vamos, vamos [Se ríe].
Miryam. Ya te digo, y aquí ha llegado hace solo 50 años [Se ríen las tres].
XL. Y el tema de Gonzalo y Margarita ¿avanza?
Inma. Algo se verbaliza, pero no mucho, la verdad. ¡Si hasta me regañan las señoras por la calle! ¡Como si yo tuviera la culpa! Seguimos con la tensión sexual poco resuelta.
Miryam. Aquí, la única que resuelve rápido es la marquesa. Tendrá muchas tensiones, pero sexuales no…
Inma. Es que ella es bastante más resuelta, sí [se ríe]. A mí siempre me ponen de pava para arriba y yo les digo: «Llevan ustedes razón, señoras».
Inma lleva un vestido rojo, de Zuhair Murad; y zapatos, de Lodi. En el centro. Miryam, con vestido, de Roberto Diz. A la derecha. Elisa luce un vestido negro, de Chic N’ Rolla; zapatos, de Jimmy Choo; y brazalete, de Uno de 50
XL. Dicen que al menos veremos a una Margarita más cómica
Inma. Más que Margarita, la auténtica payasa soy yo. Mi personaje tiene poco juego para hacer comedia, pero sí la veremos más torpe, más metepatas
Elisa. Inma lo lleva en la sangre: el humor, la frescura.
Inma. Al espectador le puede sorprender porque está acostumbrado a verme llorar como una Magdalena, pero mi gente siempre me dice. Cuando haces comedia, estás más tú que nunca… No sé cómo tomármelo [se ríe].
Miryam. Esta temporada tenemos alguna escena más cómica. Pero también te digo que el rodaje de esta serie es bastante duro, con mucha presión de tiempo.
XL. Me lo temía. Ni se habrán planteado sacar unas tomas falsas
Elisa. Pues deberían, porque mira que las hay, y muy buenas. Francis Lorenzo tiene muchísimas. Es la alegría de la huerta. Nos sube la moral a todas.
Inma. Llega a las seis de la mañana diciéndonos que estamos buenísimas Yo siempre le pregunto qué toma a esas horas.
Miryam. Lo curioso es que, después de tantos años, todos tenemos nuestro rol y Francis es el más gracioso.
XL. Así que es cierto eso de que realmente son ustedes una familia.
Miryam. Yo le he contado a mis compañeros cosas muy íntimas, porque en camerino hay muchas conversaciones personales. Inma. Si es que, en los últimos seis años, he pasado más tiempo con vosotros que con mis padres [se ríe].
Elisa. Hasta hemos visto crecer a los actores más pequeños. Imagínate, pasar de jugar con Nuño (Patrick Criado) cuando tenía 12 años a que me saque dos cabezas
Inma. Y a liarte con él [se ríe].
XL. Es que ahora están en una edad muy mala
Miryam. Completamente atrapados por la hormona [se ríe].
Inma. Yo tuve que rodar una escena con mi sobrino Alonso (Guillermo Campra), que hasta hace dos días era un niño pequeño Pero ya no. Tenía que abrazarme por detrás y al final tuvieron que cortar porque parecía que quería cogerme para otra cosa.
Miryam. A mí me pasó lo mismo con mi hijo (Patrick). Hay una escena en la que me disparan y él tiene que cogerme al vuelo. Y ya, claro A ver cómo lo explico Me agarraba como un hombre, no como un hijo. Tuvieron que cortar porque, por lo visto, la cara que se me puso no era precisamente la de una madre. [Se ríen todas].
XL. ¿Y qué tal ‘concilia’ estos niños con los suyos propios, Miryam?
Miryam. De momento, muy bien. Tengo dos mellizos de tres años y una niña de once. Mi chico es del sector y nos entendemos mucho. Tenemos un pacto para que, cuando yo tenga un pico muy alto de trabajo, él pueda reducir el suyo, y viceversa.
Ines. Estupendos, aunque no sabes lo diferentes que son los mellizos. A uno le das una galleta y no hay niño, y el otro está todo el día corriendo de un lado a otro.
Miryam. Son totalmente opuestos. uno es pelirrojo, superpunki, gallego Es un vikingo. Y el otro es moreno, tranquilo, buena gente, como su padre, todo paz y amor.
XL. ¿Podemos decir que ser madre de tres niños y trabajar es más de superheroína que lo de Águila Roja?
Elisa. Más que de heroína, yo diría que es de diosas [se ríe].
Miryam. Es que las mamás trabajadoras en este país tenemos mucho mérito.
Inma. A diferencia de un hombre, que ellos no tienen que recuperarse o retirarse una temporada para dar de mamar. No se puede comparar.
XL. Ni hay que inventarse tramas, como ha ocurrido con el embarazo de la marquesa
Inma. Claro, ha habido otros actores de la serie que han sido papás, como Javier Gutiérrez, y eso no interfiere en el rodaje ni el guion.
Miryam. Yo, con un embarazo gemelar, era inviable que siguiera rodando a partir del cuarto mes, porque se considera de riesgo y los médicos ya no te dejan trabajar más.
Inma. Y, aun así, aguantó la tía… Con unos pechos que tenía la marquesa que se le abrían todos los corsés por detrás.
Elisa lleva vestido, de Red Valentino; zapatos, de Aquazzura; y brazalete, de Aristocrazy. Inma luce vestido, de Just Cavalli; zapatos, de Jimmy Choo; y brazalete de Aristocrazy; Miryam, con vestido, de Adriana Iglesias; y brazaletes, de Aristocrazy
XL. El estilismo del siglo XVII no ayuda mucho con el embarazo, ¿no?
Miryam. Era brutal. Mis pobres compañeras de vestuario se las vieron y se las desearon. No se pudo cambiar la ropa por temas de presupuesto y a todos los vestidos les quedaban más de 30 centímetros para cerrar. ¡Todo un cromo el perfil de la marquesa!
Inma. Ella es la que más sufre con ese tema. Yo también he llevado corsés superapretados y con varillas muy incómodas, pero algo más sencillos.
Elisa. La cuestión es que, al hacerlos a medida y cuidar tanto los detalles, a una la transportan a esos tiempos y es más fácil situarse.
Inma viste con cazadora perfecto y falda de piel gris, de Nicolas Vaudelet; En el centro. Elisa, con cazadora perfecto, de Christian Dior; pantalón, de Other Stories; y collar, de Uno de 50. A la derecha. Miryam, con chaqueta y falda, de Isato; y anillo, de Uno de 50.
XL. Y ese vestuario, ¿no es un poco ‘loco’ para la época?
Inma. Se permiten muchas licencias. Si empezamos por situar un ninja en la España del siglo XVII, ya se sabe que mucho rigor histórico no va a haber. [Se ríen todas].
Miryam. Desde el arranque de la serie se habló siempre de romper las normas. La marquesa, por ejemplo, es el color en un mundo de grises y miseria; pertenece más al terreno fantástico que al real.
Elisa. Se ha creado una atmósfera que sigue los cánones históricos, pero también vanguardistas propios del género de aventuras o del cómic.
Miryam lleva vaqueros, de Philipp Plein; blusa, de Gucci; botines de flecos, de Aquazzura; y collar, de Uno de 50. En el centro. Inma, con chaqueta y falda, de Ana Locking; zapatos, de Jimmy Choo; y brazalete, de Uno de 50. A la derecha. Elisa con abrigo, de Burberry Prorsum; top de Lola Li; pantalones, de Philipp Plein; y zapatos, de Aquazzura
XL. ¿Y qué tal lo llevan ustedes?
Miryam. Realmente es una tortura y, si digo lo contrario, mentiría. Ni en las escenas en las que llevo bata de casa estoy cómoda. Y no, una no se acostumbra a llevar esas ropas, esos corsés, esas faldas sobre faldas Pero el personaje lo requiere y toda esa incomodidad se recompensa en la construcción del personaje.
Inma. Es verdad. En las primeras temporadas era superagobiante, pero ya nos hemos acostumbrado.
Elisa. Y al final es un lujo llevar esos trajes tan elaborados.