Excentricidades americanas
En Estados Unidos abundan las ordenanzas estrambóticas. A menudo proceden de pleitos que se han saldado con resoluciones que, fuera de contexto, resultan grotescas. En Kentucky, por ejemplo, cada persona debe bañarse una vez al año; en Blythe, California para poder llevar botas de cowboy en público hay que ser dueño de al menos dos vacas…
Y aún hay más…
En Greene, Nueva York, es ilegal comer cacahuetes y andar hacia atrás cuando hay un concierto; en Florida, las mujeres solteras no pueden saltar en paracaídas los domingos; en Míchigan, la Liga Profesional de Hockey logró que se prohibiera lanzar pulpos a las pistas de hielo. En fin…
Tirar de la cadena en Suiza
Si viajamos a la muy civilizada Suiza y se presentan ciertas emergencias al final del día, conviene apresurarse. En Suiza está prohibido, por ley, tirar de la cadena a partir de las diez de la noche, para proteger a los vecinos del ‘estruendo’ de las cisternas. Consideran que vaciarlas tan tarde provoca contaminación acústica.
Restos del pasado
En Gran Bretaña aún perviven regulaciones arcaicas que hoy suenan disparatadas: la que estipula que «las ballenas varadas y los esturiones deben ser ofrecidos al monarca», data de 1322. Desde 1313 está prohibido llevar armadura en el Parlamento. Y desde 1872 «es ilegal estar borracho en el pub». Increíble, pero cierto.