Fortuna, Murcia
Donde vender golf era vender humo
Dos millones de metros cuadrados y 2800 casas abandonadas desde 2010; esto es Fortuna Hill Nature y Residential Golf Resort. De haberse finalizado, este pequeño municipio murciano habría duplicado su población. En 2010, cuando el promotor entró en liquidación -con una deuda de 120 millones-, apenas se había ejecutado el 17% de la obra.
Rotondas y saqueo
La burbuja también pobló España de rotondas; muchas, absurdas e innecesarias. Esta del Golden Sun Beach & Golf Resort no es, sin embargo, el mayor despropósito de este proyecto abandonado en 2010.
Pulpí, Almería
Sus chalés y apartamentos, «con vistas al mar, jardines, piscinas y campos de golf», son hoy un fantasma de ladrillo a merced de los saqueadores.
Villamayor de Calatrava, Ciudad Real
Un triángulo de delirio
La provincia manchega se hizo famosa por su aeropuerto fantasma, pero no fue ese su único desmán inmobiliario. Esta urbanización, a 10 kilómetros del aeródromo, ofrecía 500 lujosos chalés y «un nuevo concepto de vacaciones». Una megalomanía urbanística que nunca llegó a ponerse en marcha y que conformaría un triángulo perfecto con el Reino de Don Quijote, un resort con casinos, centros de convenciones…
Buniel, Burgos
La gran quiebra
Proyectada para 1400 viviendas, en la urbanización Soto Real solo se habían iniciado 312 cuando la constructora Martinsa-Fadesa protagonizó la mayor quiebra de nuestra historia. Los impagos hundieron a las empresas locales, y el Ayuntamiento se quedó sin cobrar un crédito a la promotora de 700.000 euros. Hoy, el 60% está en manos de bancos.
San Mateo de Gállego, Zaragoza
El sueño desierto
Martinsa-Fadesa tenía en Aragón 4000 viviendas en marcha cuando suspendió pagos. Esta urbanización con «grandes comodidades» sonaba atractiva en tiempos en que se soñaba con Gran Scala, un complejo de casinos y parques temáticos en Los Monegros que atraería a millones de visitantes.
Pego, Alicante
El futuro era el ladrillo
La urbanización Bella Rotja fue otro de los fiascos urbanísticos con la inmobiliaria del empresario Fernando Martín de por medio…
Pego, Alicante
El proyecto iba a multiplicar la demografía de este pueblo de tradición agrícola de tal modo que el propio Consistorio comprometió 1,9 millones de euros en servicios para afrontar un aumento de población que nunca llegó.
En apenas 18 años, de 1989 a 2007, la superficie urbanizada en España se multiplicó por dos. En el boom de la construcción en España, se llegaron a construir más casas que en Alemania, Francia e Italia juntas. Hoy, mientras el mercado inmobiliario se recupera, miles de viviendas en urbanizaciones abandonadas salpican todavía nuestro paisaje. Por Fernando Goitia / Fotos: Markel Redondo
