¿Quién fue Jack el destripador? El último análisis forense apunta al barbero Aaron Kosminski como el histórico asesino, pero a la comunidad científica no le convence.
La identidad del asesino en serie ha sido siempre un misterio con varias líneas de investigación y sospechosos.
Montague John Druitt, el médico
Un médico que desapareció en la época del último asesinato del Destripador. Su cuerpo fue encontrado en el Támesis al mes siguiente. Hubo alegaciones de que Druitt, de 41 años, era ‘sexualmente insano’. El inspector Macnaghten creía que era el asesino.
Seweryn Klosowski, el barbero
El polaco Klosowski llegó a Londres en 1887 y adoptó el nombre de George Chapman. Trabajó como barbero en Whitechapel. En 1903 fue colgado por envenenar a tres de sus mujeres. El inspector George Abberline pensaba que era el mayor sospechoso, pese a que su método era el veneno y no el cuchillo.
Albert Victor Christian Edward, el Príncipe
El duque de Clarence era uno de los nietos de la reina Victoria. Sufría de sífilis, lo que le habría llevado a la locura y al crimen. Aunque la cronología no encajaba, llegó a ser encarcelado con permiso de la Familia Real. Murió en un asilo en 1892.
Joseph Barnett, el porteador
Un porteador de pescado en el mercado que conocía a la última víctima, Mary Jane Kelly. Según una teoría, se habría enamorado de ella y enfureció cuando supo que trabajaba como prostituta. Con los primeros asesinatos quería disuadirla de seguir en las calles. La apariencia física de Barnett coincidía con la facilitada por los testigos e incluso con el perfil completado por el FBI.
Lord Randolph Churchill, el padre del primer ministro
Una de las teorías más curiosas es la que sostiene que el padre de sir Winston Churchill lideraba una conspiración masónica para asesinar prostitutas en el East End. Lo único cierto es el parecido de Churchill con la mejor descripción que existe del Destripador, facilitada por el testigo George Hutchinson, que vio a un hombre con Mary Kelly justo antes de que fuese asesinada.
Lizzie Williams, una mujer
Hace tres años, un libro aseguraba que el famoso asesino en serie era en realidad una mujer, Lizzie Williams, la esposa de uno de los sospechosos, el médico John Williams. Se argumentaba que Lizzie lo hizo tras enloquecer por ser estéril, lo que se vinculaba al hecho de que a tres prostitutas les habían extirpado el útero.