Anatomía de una rata de laboratorio
Estas ratas son nuestro gran aliado en la lucha contra la COVID-19. Así es una rata de laboratorio. Fotografía: Heidi @ Hans-Jürgen Koch/ Edition Lammerhuber
• Ratas de laboratorio, claves en la lucha contra la COVID-19
→ La más común
La especie más usada es la Mus musculus, aunque las distintas alteraciones genéticas dan lugar a especies inexistentes en la naturaleza.
→ Parientes cercanos
El genoma de los ratones se agrupa en 20 pares de cromosomas. El del ser humano, en 23. Ambos son muy parecidos: compartimos un 95 por ciento del genoma con el ratón.
→ 30 gramos de vida
El tamaño de un ratón adulto oscila entre los 12 y los 15 centímetros desde la nariz a la cola. Al nacer, pesa uno o dos gramos y gana peso rápidamente durante la lactancia. Alcanza en torno a los 30 gramos al llegar a la edad adulta.
→ Rápida reproducción
Es pequeño y fácil de criar. A lo largo de su vida produce unas diez camadas. Los ratones tienen un periodo de gestación muy rápido: entre 19 y 21 días. Además, tienen un alto número de crías en cada parto.
→ Producción en cadena
Para comparar resultados, los experimentos necesitan individuos de una misma cepa, con genes idénticos. Debido a que soportan
bien la consanguinidad, es posible obtener líneas de individuos genéticamente idénticos, casi homocigotas.
→ Vive rápido,muere joven
La vida media de los ratones es más corta que la de otros mamíferos. En apenas dos meses tenemos un individuo joven. En un año ya tienes el equivalente a un ser humano de 65 años. En apenas dos años, a una persona de 90.
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