Nuevas investigaciones demuestran la importancia del horario en la medicación: influye en su eficacia y sus efectos secundarios. Por María Corisco
Las posibilidades de sufrir un infarto, una insuficiencia cardiaca o un ictus se reducen en un 53 por ciento cuando el tratamiento antihipertensivo se toma por la noche en vez de por la mañana».
Un estudio reciente concluye que conviene tomar los medicamentos para la hipertensión por la noche
Con esta afirmación, los investigadores del proyecto Hygia vuelven a poner en la mesa del debate algo que se sospechaba desde tiempo atrás: que la pastilla para la tensión, que toman cientos de millones de personas en todo el mundo, podría ser más eficaz si se administra al acostarse en vez de al levantarse. El proyecto Hygia, llevado a cabo por investigadores españoles, es «el mayor estudio de riesgo cardiovascular prospectivo realizado nunca», explica Ramón Hermida, uno de sus coordinadores. A lo largo de 11 años se estudió y monitorizó a 18.078 pacientes hipertensos. Los resultados revelan que es mejor tomar los medicamentos para la tensión a la hora de acostarse. Aun así, advierten los investigadores, es necesario realizar más estudios para confirmar que estos hallazgos son extrapolables a todos los hipertensos: no es buena idea cambiar la hora a la que uno se toma la pastilla sin antes consultarlo con un médico.
Con esta investigación se vuelve a poner sobre la mesa el concepto de ‘crono-farmacología’, una disciplina que estudia la relación entre el tiempo cronológico de administración de los medicamentos y la respuesta biológica del organismo y analiza si el horario aumenta la eficacia de los medicamentos y si influye también en las posibles reacciones adversas. Dado que cada uno de nosotros tiene su propio reloj y que las enfermedades tienen también sus ‘horarios’, es lógico que la acción de un fármaco pueda variar.
Y ¿por qué las pastillas son como son?
La mayoría son redondas para rodar mejor por los conductos de las máquinas que las fabrican. Se ‘pintan’ con hasta 30 colores: ganan las blancas (son más baratas) y no hay negras porque no son apetecibles. Muchas pastillas se lacan para protegerlas de la luz y de la humedad. Además, el lacado enmascara el sabor amargo y también las protege de los jugos gástricos.
Colesterol, mejor al acostarse
Se recomienda tomar las estatinas -los fármacos anticolesterol más prescritos en el mundo- por la noche y en dosis única. Se sabe que la síntesis de colesterol ocurre entre las doce de la noche y las dos o las cuatro de la madrugada. Si se toma la estatina a última hora de la tarde, su efecto
máximo (que se alcanza a las dos o tres horas) coincide con el momento en el que el hígado sintetiza el colesterol.
Hipotiroidismo, ¿siempre por la mañana?
Los pacientes con hipotiroidismo reciben una indicación clara: tomar la medicación por la mañana en ayunas. Pero hay estudios que lo cuestionan: una investigación llevada a cabo en el hospital Maasstad de Róterdam sugiere que la levotiroxina tomada a la hora de dormir mejoraría significativamente los niveles de hormona tiroidea, y otros estudios apoyan la tesis de que la hora de administración de este fármaco es irrelevante.
Artritis reumatoide, también por la noche
Los pacientes de artritis reumatoide dicen que su momento de máximo dolor es mucho mayor por la mañana, al levantarse. Por eso se recomienda tomar la medicación por la noche. En otra patología reumática, la artrosis, el dolor suele presentarse por la tarde, por lo que se suele aconsejar tomar los antiinflamatorios por la mañana. Dado que el dolor provocado por el deterioro del cartílago no se presenta a la misma hora en todas las personas, se podría plantear la toma de medicación entre cuatro y seis horas antes de que el dolor llegue a su pico máximo.