La niña hondureña que estremeció al mundo con su llanto en la frontera entre México y EE.UU., a la espera de asilo en Washington. Por E. F.
La imagen corrió como la pólvora y -al igual que la de Aylan Kurdi, el niño sirio hallado muerto en las costas turcas en 2015- supuso un punto de inflexión en la política migratoria, en este caso, de Estados Unidos. En junio de 2018, Yanela Sánchez -hondureña de dos años y medio- lloraba desconsolada cerca de la frontera de Estados Unidos y México mientras la Policía detenía y registraba a su madre, Sandra.
La imagen cambió la política migratoria de Trump que separa a los niños de sus padres
La escena captada por el fotógrafo de Getty John Moore saltó a la portada de todos los periódicos e incluso a la de la revista Time y se convirtió en un símbolo contra la impopular política migratoria de Donald Trump que, por entonces, separaba a los hijos de los padres. Aunque más tarde se supo que Yanela no fue separada de su madre, la política de Trump dejó de aplicarse. Tras 18 días retenidas en tres instalaciones diferentes, Sandra y Yanela fueron liberadas. Hoy viven en Washington a la espera de una fecha en la corte, para la que no cuentan con abogado. Ambas buscan el asilo.