Irán, bajo la superficie
Un estado siempre presente
El autobombo del régimen es omnipresente, promoviendo valores nacionalistas y religiosos. Por otro lado, los reformistas han relajado el código de vestimenta permitido a las mujeres. En Teherán sobre todo, ya no domina el estricto chador negro -el recomendado por las autoridades religiosas- y se usan abrigos y pañuelos algo más cortos y de colores brillantes.