La pandemia ha estresado y agotado a los padres hasta límites insospechados. Los psicólogos ya hablan de ‘burnout parental’ y dan la voz de alarma: sus  duras consecuencias las sufren los hijos. Aquí van algunos consejos para sobrellevar la pandemia y ayudar a tus hijos.  Por R. P./Foto: Adobe Stock

• El síndrome ‘burnout’ y la pandemia: ¿qué les pasa a mis padres?

Disciplina positiva

1. Redirija la mala conducta

Ya sabemos que a estas alturas la paciencia vive sus horas más bajas, pero, cuando el mal comportamiento ha entrado en bucle, a lo mejor es hora de darle otra oportunidad a la educación positiva. Muchos expertos –entre ellos, la Asociación Americana de Psiquiatría– aseguran que los niños se portan mal porque están aburridos o sencillamente no saben hacer otra cosa. Dedicar un poco de tiempo a encontrar y ofrecer alternativas para sacarlos de ese círculo vicioso puede merecer la pena. Si además elogiamos su éxito por cambiar de actividad, podemos asentar recursos útiles para su futuro.

2. Emplee recompensas y privilegios

Para reforzar las buenas conductas que normalmente no daría en épocas menos estresantes: terminar las tareas del colegio o las de la casa, llevarse bien con los hermanos…

3. Pruebe a no responder

A veces prestamos más atención a los malos comportamientos que a los buenos y el niño entiende que, para que le hagamos caso, es mejor portarse mal. Pues se acabó. Siempre que no esté haciendo algo peligroso, ignorar esa conducta puede ser una forma eficaz para que deje de hacerlo. Inspire, espire.

4. Use las pausas obligadas

Lo de parar para recapacitar está muy trillado, pero nuevos estudios dan más claves para volver a intentarlo. Según un informe realizado por la Universidad de Ciencias y Salud de Oregón, esta herramienta de disciplina funciona mejor si los padres utilizan pocas palabras. «El mayor error que cometen es hablar y dar muchas explicaciones durante esos tiempos de espera», asegura el profesor y pediatra Andrew Riley, autor principal del estudio. Es mejor advertirles primero y, si no paran, recordarles lo que hicieron mal de forma breve. Luego apártelos de la situación durante un periodo previamente dispuesto (un minuto por año de edad es una buena guía de referencia).

Mantener las rutinas saludables

1. Estructure el día

Con el cambio en las rutinas habituales, establezca horarios diarios nuevos. Involucrar a los niños en esa planificación, sobre todo a los más mayores, puede hacer que sean más respetuosos con lo establecido porque se ven partícipes. Este horario debe incluir actividades escolares y tareas de casa, pero también actividades recreativas, ejercicio físico o contacto virtual con los amigos.

2. Elija sus peleas

Este consejo, que sirve para casi todo en la vida, cuando de niños se trata multiplica su valor. Establezca una lista de comportamientos que pueda tolerar o aguantar e identifique los dos o tres que considere innegociables (sí, ha leído bien, ¡solo dos o tres!). Explíqueles bien las consecuencias de saltarse las normas establecidas, por ejemplo, confiscar tabletas o móviles.

3. Rutinas de descanso

Aunque la flexibilidad es más importante que nunca, a la hora de irse a dormir intente mantener las rutinas normales como, por ejemplo, leer con ellos un libro.

Hablar sobre los temores

1. Los niños confían en sus padres como fuente de seguridad, física y emocional. Tranquilice a sus hijos. Dígales que cuentan con usted.

2. Responda a las preguntas sobre la pandemia de manera simple y honesta. Se puede hablar con ellos sobre cualquier noticia que los atemorice, pero recordándoles que las medidas de seguridad ayudan a que todos se mantengan sanos.

3. Dedique tiempo a hablar sobre sus sentimientos y dé ejemplo explicándoles como está manejando usted los suyos.

4. Avise a su hijo antes de salir a trabajar o hacer recados. Dígale adónde va, cuánto tardará
y que toma las medidas necesarias para cuidarse.

5. Mire al futuro. Dígales que los científicos están trabajando para descubrir cómo ayudar a las personas y que las cosas van a mejorar.

 6. La receta más fácil a veces es la más sencilla: pruebe a decir «te quiero» con más frecuencia.

Te puede interesar

Cinco consejos para evitar que el estrés adulto provoque ansiedad infantil

Nuevo XL Semanal
El nuevo XLSemanal

A partir de ahora consulta los nuevos contenidos en la web de tu periódico

Descúbrelos