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Turismo de Perú

Perú, riqueza y tradición

Perú son los tesoros que se esconden y las tradiciones que exhibe. Tan incomparable y auténtico es su legado como única es la experiencia de descubrir un país donde historia y cultura nos transmiten la esencia misma de la vida: un viaje en el que, mientras más conoces, más rico y vivo te sientes

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Cristina Castañer

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Imaginen a un emperador inca y a su corte honrando al dios Sol en un esplendoroso ritual. Piensen en una impresionante fortaleza de gigantescas rocas talladas a más de 3.500 metros de altura. Evoquen la magia de uno de los lugares más misteriosos del planeta, o mejor no lo imaginen porque cada 24 de junio es posible presenciar los ritos sagrados del Inti Raymi en el complejo arqueológico de Sacsayhuamán. La ceremonia prehispánica más grande y majestuosa de Perú es un espectáculo en vivo donde cerca de mil actores representan a sus antepasados con el mismo fervor que hace 600 años.

En agradecimiento al dios Sol, símbolo supremo y de adoración en la cultura inca, la ciudad de Cusco se engalana y miles de personas se echan a la calle para celebrar el fin de la cosecha y el solsticio del invierno en el hemisferio sur. La Fiesta del Sol es solo una muestra de que la herencia de las antiguas civilizaciones está presente en Perú, un país donde las tradiciones importan y se comparten. Cualquier viajero puede descubrir la esencia de fiestas y celebraciones fascinantes que enriquecerán su vida para siempre.

Como un oasis de autenticidad cultural se presentan las islas de la bahía de Puno,  habitadas por comunidades de origen quechua y colorida vestimenta que mantienen el arraigo de sus costumbres ancestrales. Uno de los tesoros ocultos es la isla de Taquile,  cuyos pobladores son expertos en el arte textil, declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco. Los visitantes pueden ver a los tejedores en sus telares de pedal, e incluso hospedarse en sus casas para compartir experiencias.


LA RIQUEZA DE UN IMPERIO ETERNO


En lo más alto de una montaña, a Machu Picchu acuden los amantes de la aventura y la naturaleza, y los que quieren saber más de un periodo histórico incomparable

Tahuantinsuyo, así se llamó el estado más importante y poderoso de la América precolombina: dos millones de kilómetros cuadrados entre el Océano Pacífico y la selva amazónica, cuatro regiones y 15 millones de súbditos en su época de mayor esplendor. Los incas conquistaron estas tierras para formar el imperio más extenso y la cultura más avanzada de todo el continente.

Rico y poderoso, así se siente todo aquel que llega al santuario de Machu Picchu, el corazón del Tahuantinsuyo. Un viajero privilegiado al contemplar una de las joyas arqueológicas más importante del mundo y el área protegida más visitada de Perú. Centro político, religioso y administrativo de la época inca, está rodeada de templos y canales de agua. Construido en lo más alto de una montaña, a Machu Picchu acuden los amantes de la aventura y la naturaleza, y los que quieren saber más de un periodo histórico incomparable.

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PERÚ MILENARIO


Adentrarse en una tierra tan singular y única consigue que el concepto de riqueza quede completamente renovado y actualizado hasta hacerlo más integral, más humano y más amplio. En las faldas de la cordillera de los Andes emerge el Templo de las Cabezas Clavas de Huántar, uno de los principales oráculos del Perú antiguo. Hasta allí acudían los miembros de la cultura Chavín para dejar ofrendas a sus dioses, rodeados de rostros mitológicos tallados en piedra.

Sobre caballitos de totora, embarcaciones hechas con junco del lago Titicaca, se extendieron los reinos del norte como los de Moche y Chimu. Cerca de Trujillo se encuentra la impresionante ciudadela de Chan Chan, hecha solo de adobe, una vivencia extraordinaria que es mucho más que un atractivo turístico milenario.

En el país más rico del mundo la cultura permanece no solo resguardada en sus grandes museos, sino también exhibida cada día en cada rincón de su territorio. No hay mayor herencia que pueda recibirse que la que regala vida y cultura, la que hace nuestra existencia más rica y más consciente. La esencia de ese viaje llamado vida se concentra en un país: Perú.

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