Especial verno El viaje Un día en Punta Cana con Hombres G «Somos «titis» caribeños»
Los Hombres G nos llevan de excursión por sus rincones preferidos de República Dominicana. En sus 25 años de carrera es la primera vez que tocan en la isla. La cita. el festival Ron Barceló Desalia 2011. El Caribe les seduce ¡como a tantos! Texto y fotografías Daniel Méndez
Mucho rollo con los limones del Caribe y luego llegas y de milagro sobrevives , cantaba Hombres G en su tema Nassau, que hablaba de una desafortunada noche en las Bahamas. Hoy, 25 años después de que naciera ese tema, nos encontramos con ellos en otro rincón del paraíso caribeño. Punta Cana, en el extremo este de la República Dominicana. Hasta aquí se han desplazado estos cuatro viejos amigos para dar un concierto en la
IV edición del festival Ron Barceló Desalia 2011, donde hicieron saltar y corear sus canciones a los más de 6000 asistentes vestidos de blanco. David Summers, Dani Mezquita, Rafa Gutiérrez y Javi Molina se lo toman con mucha calma bañados por el sol caribeño. Toda esta zona es una maravilla. Hemos tocado en Puerto Rico, en México, ahora en Dominicana. El Caribe nos es muy familiar , cuenta David Summers, la voz cantante, literalmente, de la banda y su rostro más conocido. Somos titis caribeños , apostilla con su habitual buen humor Rafa, el guitarrista.Sin embargo, es la primera vez que tocan en la República Dominicana. Y eso que los fans no les faltan desde el golfo de México hasta la Tierra de Fuego, en el extremo sur del continente.David se declara fan de un célebre dominicano. Juan Luis Guerra. Es de lo más grande que ha dado la música. Hace años, cuando estábamos tocando en Puerto Rico, nos vinimos unos días a Santo Domingo. Allí escuché Ojalá que llueva café y le dije a Dani. Esto es un temazo, tenemos que hacer una versión. Todavía no lo conocía nadie. Dani, por alusiones, interviene. Yo me compré todas las casetes de Juan Luis Guerra . ¡Yo me llevé los vinilos! , añade David. Y entre todos repasan otros nombres de músicos que los han seducido, como Rubén Blades. Eso sí, lo de bailar ya es otra cosa. Como bailarines somos estupendas personas , dicen entre risas.Entre tanto, nos dirigimos hacia playa Juanillo, que, con sus más de cinco kilómetros de arena blanca, palmeras y aguas azul turquesa, es un remanso de paz. Mira qué colores tiene el agua , exclaman casi a coro al llegar. Como si estuviera preparado para darles la bienvenida, alguien les ofrece a probar agua de coco recién cortado. Al rato, David está ya con el agua hasta las rodillas haciendo fotos. La crema protectora pasa de mano en mano y, para calmar la sed, nada como una cerveza fresca en Juanillo Beach Food and Drinks (está en la propia playa; tel.. 001 809 543 28 81). No habrá tiempo esta vez, pero a más de uno le hubiese gustado calzarse las aletas y lanzarse a hacer submarinismo. La primera vez que lo practiqué fue en Puerto Rico explica David. Es flipante. En esta zona alucinas con todo lo que ves. Mi único problema es que a mi mujer le da claustrofobia y, claro, ir solo no es lo mismo. Dani, por su parte, hizo sus primeros pinitos no lejos de donde nos encontramos. Me vine de viaje de novios a La Romana, que está entre Punta Cana y Santo Domingo comenta, en 1990. Aprendí a bucear allí. Yo creo que ha sido el mejor sitio donde he hecho submarinismo. Precioso. La familia surge con frecuencia en la conversación. Con tanto viaje, a menudo se la echa de menos. Lo bueno es que luego conoces muchos sitios a los que después puedes volver con ellos , cuenta Javi. Y que ahora, con las nuevas tecnologías, están un poco más cerca que antes. Lo primero que preguntamos al llegar al hotel dice David es si tiene Wi-Fi. Javi añade. Y lo segundo. ¿Es gratis? . Y de nuevo suenan las risas. Somos como una gran familia afirma David. Nos conocemos desde hace muchísimo tiempo y estamos siempre juntos. En las giras comemos todos juntos, no solo nosotros, sino también el mánager y demás. Y hablando de comida. El hambre aprieta. Pásame un platanito , dice alguien. Y llega una bolsa cargada de fruta que han comprado en una parada improvisada en el llamado Cruce de Verón, un pueblo en el que confluyen las escasas carreteras que comunican las distintas playas y poblaciones en la zona. Pero con esto no basta. Hace falta algo más contundente y lo encuentran en Huracán Café (tel.. 001 809 221 66 43), un local regentado por italianos en playa Bávaro, en la localidad de El Cortecito. Pasta, carpaccio, cerveza y un colorido cóctel antes del café. En la comida se habla de música, pero esta vez española. Surgen nombres como Siniestro Total, Dover y un buen repaso a algunos grandes éxitos de los 80. Se nota que hay pasión. La misma que despiertan ellos en todo el continente. Tanto que en una ocasión, en Perú, una joven escaló 12 pisos por la fachada del hotel para pedir un autógrafo.Ahora toca descansar y prepararse para la noche. Un rato más tarde, 6000 personas corean Sufre mamón o El ataque de las chicas cocodrilo, junto con las canciones de sus discos más recientes, como Desayuno continental. n
Guía de la zona para coincidir con ellos De comprasn Productos artesanales. La plaza artesanal Acqua Beach Club, en playa Bávaro, es el lugar donde recorrer sus puestos y llevarse desde joyería local hasta maracas decoradas, ron y puros. n Ron «decorado». Los artistas decoran botellas de ron blanco dominicano con frutas maceradas en su interior. Cuestan entre 10 y 25 euros. En Recetas Mi Amor. Avenida Barceló, km 3. Playa Bávaro. Para comern Captain Cook. Cada uno elige el pescado o el marisco y lo cocinan ahí mismo. Las vistas, impresionantes. Cuesta unos 50 euros. Está en El Cortecito. Tel.. 809 552 10 61.Para tomar una copan Pachá. Con sabor ibicenco, está en el complejo Riu Hotel. Para bailar ritmos tropicales, disco y pop. Tel.. 809 221 22 90.Para dormirn Cap Cana es donde están los resorts más exclusivos, alejados del concepto todo incluido. Desde las villas que ofrece Caleton Villas hasta el Secrets Sanctuary Cap Cana, solo para adultos. www.capcana.com.n Puros dominicanos. En Cigarros Don Lucas puede verse a los maestros en acción, liando manualmente los puros que más tarde adquirimos en la propia fábrica (y solo allí). Máxima calidad con el aliciente de ver a los tabacaleros en acción. Está en la carretera que une Friusa y Verón (tel. 809 552 12 12). En Coralina Tropical se puede encontrar una amplia oferta de cigarros. Merece la pena dejarse recomendar. Está en la carretera Verón-Bávaro (tel. 809 466 21 21).